martes, 28 de diciembre de 2010

Ritual de Apareamiento en Pata Negra


Hoy fui a echar chela al Pata con un amigo y salieron los temas clásicos del amor y así, él tiene una teoría de ver las cosas, dice que todo lo que sucede con nosotros en cuanto al amor no es nada más que el instinto de reproducción que tenemos todos los animales que habitamos este planeta, al principio me pareció un poco frío lo que decía, pero entre más se extendió en el tema, más razonable me sonaba lo que decía, así que tomamos como ejemplo dos individuos de diferentes géneros que estaban a pocos pasos de nosotros en pleno ritual de apareamiento. El macho (Alfa) se movía con singular alegría, en lo que abría discretamente los botones superiores de su camisa, para mostrar virilidad ante la hembra, haciendo movimientos de fuerza y caza al ritmo de Kinky. La hembra por su parte, movía la cadera para mostrar fertilidad ante el mencionado espécimen, todo esto motivado con hartos shots de catalizador de reproducción llamados tequilas.

Entonces empecé a ver que toda los individuos del lugar se movían en la misma sintonía, y en lugar de sentirme en un bar, me sentí dentro de una filmación de Animal Planet, analizando cada movimiento de las personas, la noche pasaba y el me explicaba el porqué las personas sufríamos cuando terminábamos con alguien, y todo tenía que ver con la naturaleza y no con la decisión de cada individuo, más bien con la permanencia de la especie. También platicamos de los dos términos tan extremos para mencionar el apareamiento de las personas uno en super cursi y fuera de contexto es llamarlo hacer el amor, y el otro vulgar y vano es coger, así que buscamos el término exacto y medio, que se refiriera al acto en sí de un modo más exacto y encontramos que la media podría ser llamarlo coger con cariño, así eliminamos los extremos y nos quedamos con algo relativamente bonito y con sentimiento. Entre todas las teorías y mediante transcurría la noche yo reía y reía, sin embargo, llegue a mi casa a redactar lo sucedido y me doy cuenta que yo, en mi afán de no cambiar mi pensamiento romántico y estúpido que tengo, todo lo tomo como chiste y sigo creyendo en el amor bonito que puede existir entre las personas, tengan que reproducirse o no.

martes, 21 de diciembre de 2010

1800 + Alderete


Si la navidad resulta ser una basura al menos brindar con una bonito diseño en la botella que nos vamos a empinar.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Por qué no fui wey?

Llevo dos días deprimida, triste, rara, sensible, chipil, chillona, berrinchuda, fea, sin chiste, flaca, opaca y cansada. La respuesta es siempre la misma, te va a bajar estúpida.

domingo, 19 de diciembre de 2010

16

Era verano, me puse mi nuevo uniforme, pantalón azul, camisa amarilla, corbata y gorra con la M de Mc Donald's bordada en amarillo brillante, no podía estar más nerviosa y más emocionada a la vez. El primer día fue extraño, conocer gente nueva, casi todos más grandes que yo, en realidad era bastante tímida y moría de miedo, llegué junto con mi hermana y dos chavitos más que también eran nuevos. Uno de ellos era un niño de ojos tristes, pelo lacio, delgado y con la sonrisa más bonita que jamás hubiera visto, con hoyitos en los cachetes y dientes parejitos, de inmediato nos hicimos amigos, aprendiamos juntos, nos ayudabamos y nos buscabamos para todo, fue una de esas veces en que la química fluye sin pensarlo y quieres ver y estar con una persona sólo por el gusto de sentirla cerca.

Cuando terminaba el día me acompañaba a la parada del camión y
dejábamos pasar 3 o 4 camiones antes de subirme, ya que preferíamos platicar sentados en la banqueta, intercambiamos credenciales de la escuela, yo aún conservo la suya de tercero de secundaria, íbamos al cine Apolo y teníamos la mala suerte de entrar a ver las peores películas, sin embargo lo importante era estar juntos, riéndonos de todo y comiendo palomitas. Para vernos siempre deciamos que nos veiamos en el lugar de siempre y a la hora de siempre, y ése lugar resultaba ser la parada del autobús del parque de Satélite.

El empezó a tener novia y yo también, pero nunca dejamos de ser amigos y contarnos todo. En las fiestas siempre
teníamos que bailar aunque sea una juntos y así pasaron los años, entramos a la Universidad y cambiamos de trabajo, sin embargo nunca dejamos de contactarnos, él pasaba a visitarme a mi casa de vez en cuando saliendo de la escuela y sosteníamos largas charlas en el coche, me contaba de sus desamores y yo de los mios, teníamos como 21 años ya y nos dijimos que si a los 30 no nos habíamos casado aún, nos casaríamos nosotros, como en las pelis.

Finalmente nunca fuimos nada, sólo grandes amigos, Él se casó a los 30 y aunque más lejanos, cada vez que hablamos siento el mismo gusto por saber de él y ahora que me acuerdo de ese sentimiento, extraño tanto la
magia que se siente cuando algo no lo forzas, cuando no planeas tanto, cuando no hay contratos, cuando nadie es propiedad de nadie, cuando no importa que pase mañana, cuando no buscas que alguien te resuelva la vida, cuando no hay presión de nada, cuando nadie lastima a nadie, cuando no hay presiones sociales, cuando sólo disfrutas de la compañia de alguien, cuando la gente sólo se quiere y ya.

Y entonces y sólo entonces sientes, quieres y compras a alguien para toda tu vida, justo como cuando tenía 16.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

La mitad del tiempo que duraste? No me chinguen

Después de un truene, cuánto tiempo pasa para que se vaya el dolor? Es una pregunta que nos hacemos después de terminar una relación, el psicólogo me dijo que un duelo sano a lo mucho dura dos años. Dos añoooos? No me chingue, es una eternidad. Otros, más optimistas me dijeron que la mitad del tiempo que duraste es el tiempo para olvidar, así que si duraste un año, seis meses bastarán, poooor? es un maldito infierno, y mientras trataba de escuchar a alguien que me dijera algo así como en un par de días estarás increíble, transcurrían las noches, los días y las semanas.

Despiertas (Y eso, si pudiste dormir) con una extraña sensación angustiosa en el pecho, un asqueroso vacío en el estómago, el mejor lugar en el mundo es justo debajo de tus cobijas, la mejor música es la más triste, sólo necesitas sentir complicidad con el sentimiento del cantanto en cuestión, comes por pura inercia, poco y mal, te ves al espejo y te sientes completamente horrenda, tienes más ojeras que de costumbre, caminas en la calle como robot, no soportas las pelis de amor, ni las parejas besuqueándose en el parque, ni los mensajes melosos de tus amigos en facebook, tu teléfono no suena, ni llegan mensajes y si suena corres y es la estúpida señorita del Afore.

Definitivamente éste tiempo es el más peligroso ya que por querer sentir alivio inmediato cometes las peores estupideces del planeta, desde llamarle al exinterfecto y suplicarle amor, para que él estúpido (ahora con el ego hasta arriba) te reafirme lo que ya sabes, NO, entonces logras sentirte un poco peor. Puedes querer cambiar de look y hacerte un corte de pelo del que seguramente te vas a arrepentir durante mucho tiempo o, posiblemente te pondrás una peda, de esas legendarias y maratónicas que incluyen black out o besos con extraños y sólo lograrán afirmarte al día siguiente lo pinche sola y cruda que estás.

Todos tus amigos te escuchan, te dan palmadas en la espalda y consejos, entonces te sientes acompañada y querida, al paso de 4 días de estar platicando lo mismo, lo mismo y lo mismo a esos mismos amigos. les das una weba infinita y te comienzan a dar el avión, la ropa no te queda porque adelgazaste o engordaste según el caso, así que te sientes más fea que nunca, te pones a imaginar que el ex seguro ya tiene vieja, la ama y es feliz, te los imaginas besándose (en el mejor de los casos) y es entonces cuando tu vida se va a la mierda, juras que perdiste al amor de tu vida y que nunca jamás llegará alguien del que te puedas enamorar, la semana transcurre normalmente, vas al trabajo, rindes la mitad, tu jefe que te daba chancecita porque estabas tristeando, está harto de que llegues tarde y te quieras largar temprano porque te urge llegar a tu casa a llorar, pero los fines, los malditos fines de semana también llegan, y mientras todos twittean frases como por fin viernes, tu sólo quieres que sea lunes again.

Después de un tiempo así, empiezas a distinguir si extrañas al ex por amor o sólo por soledad y ésto es un buen comienzo, al menos ya distingues cosas, ya puedes poner en una balanza las cosas buenas y las malas, ya no eres víctima ni victimario, ya no es blanco o negro, ya hay grises y en estos grises hay momentos que te la pasas sorprendentemente bien, sin acordarte del ex de mierda, pero el malestar de una u otra forma ahí sigue, como machetito.

De pronto llega un fin, que en efecto te fuiste de fiesta, pero la pasaste bien y te das cuenta de todas las ventajas que se tienen al no tener wey, sales a todos lados, ves a amigos de antaño, no celas, no te celan, nadie se enoja contigo, sales con tu familia, te das cuenta de lo chingón que puede ser ir solo al cine, a correr e incluso a comer. Recuerdas y te pones a hacer cosas que te gustaban y que por tener novio no hacías, haces planes para ti y entonces y sólo entonces, te despiertas un buen día, y te das cuenta que hay guapos caminando por la calle, que la ropa te queda bien, que te ríes de cualquier cosa y que llegaste a tu casa sin que haya pasado absolutamente nada relevante en el día y aún así te sientes bien, puedes dormir como un bebé y te das cuenta que si te acordaste del ex en algún momento fue sólo porque alguien te pregunto de modo morboso, No has sabido nada de ...?
Entonces estás listo para volverte a enamorar, claro, sin ninguna garantía de que te vuelvan a romper el corazón, pero eso no importa, segurmente apostarás de nuevo.

Y esto no sucede porque lo olvides como si nunca hubiera existido jamás, simplemente ya no duele, y aunque si, estoy segura que hay personas que toda la vida serán importantes y estarán presentes de alguna manera, también hay otras por los que sufriste desgarradoramente y que serán lo más equis el resto de tu vida, ya que sufrías más por la idea o las expectativas que por la persona, seguramente ese ex no valió ni la mitad de una noche de insomnio y es posible que con el tiempo no te acuerdes ni del apellido del cabrón. Me sorprende la gente que cuenta que alguien fue el amor de su vida, cómo si no hubiera más vida, cuando tal vez el amor de su vida puede ser el siguiente.

Finalmente como por ley de vida, lo que no te mata te hace más fuerte. Así que cuanto tiempo dura el dolor? Depende de las circunstancias, pero aún así creo que después de tres meses comienza a ser un estúpido desperdicio de tiempo.

martes, 23 de noviembre de 2010

De la felicidad

Si alguien me quiere hacer feliz esta Navidad, pueden regalarme éste percherito de Urban Outfitters. Poder sonreír.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Como este fin


Domingo casi lunes 12:53 a.m. y a punto de finalizar el fin de semana y ésta vez sin quejarme ya que dentro de la crisis existencial que he venido cargando durante los últimos meses, puedo decir que éste fin fue muy simple y por lo mismo muy chingón. Un fin de compartir una comida, una historia y una peli con mi papá. Un domingo rudo, naco y gringo de cervezas, hamburguesas y monster trucks, dos buenas pelis, un café, un pastel imposible y una bonita charla, con uno de esos amigos que entienden con decir casi nada.

Me doy cuenta de lo simple que resulta ser la vida. Todos pasamos por cuestionamientos en varios momentos de nuestra existencia, nos llenamos de angustia, de pensar, pensar y pensar en algo que no podemos cambiar, que no depende de nosotros como es el paso del tiempo. Finalmente nada tiene sentido, todo lo que hice, todo lo que pensé, todo lo que sentí en el pasado ya no existe más, hoy solo quedan recuerdos y experiencia y así pasará con lo que hago hoy y con lo que haré en 5 años.

Creo que la vida es un lugar extraño en dónde de pronto aparecimos y estamos obligados a estar y que todo finalmente todo, va a pasar. Seguro en 80 años la mayoría, por no decir todas las personas que poblamos éste planeta no vamos a estar, nadie, ni la gente que quiero, ni Carlos Slim, ni Ana Claudia Talancón, ni el bolero de la esquina, ni Brad Pitt, ni mi gata, ni yo, todo cambiará. Esto es sólo un viaje, por lo tanto no nos queda más que empacar, tomar los aviones que tengamos que tomar, ir a todos los sitios de interés, comer cosas extrañas, comprar souvenirs y tomar todas las fotos mentales que podamos.

Finalmente ya estoy aquí, así que flojita y cooperando, se trata de pasarla bien y sólo se logra cuando te dejas llevar. Para disfrutar el viaje hay que aferrarse menos, soltarse cada vez, enamorarse de las personas, de los lugares, de lo que pasa. Como hoy, como éste fin.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Remodelación (Sin llorar)


Para los quejumbrosos ahí les van las 10 ventajas de trabajar en una Oveja en remodelación:

1.- Ahorro en el gasto de drogas, ya que el olor a thinner es gratis.
2.- Para las mujeres, el poder ver hombres fuertes y mamados trabajando arduamente.

3.- Si un andamio nos cae encima, probablemente podamos incapacitarnos unos dos meses.

4.- Si usamos tapabocas para el polvo, de una vez podemos evitar que nos de la influenza de éste año.
5.- Si al quitar el piso encontramos un tesoro, el próximo año podemos tener por fin utilidades en centenarios de oro acuñados en 1870
6.- Si encontramos los huesos del embajador, podremos vender la historia al señorcito que escribió la Casa de Cañitas y saldremos en la tele.

7.- Ahorro en el bolerito de la esquina.

8.- Si juntamos la duela que están quitando, podremos armar un juego de Jenga gigante y la Vecindad lo podrá alternar con los jueves de Pokar

9.- Para halloween la decoración de la casa será de cero pesos, con un par de murcielagos en la entrada quedará increíble.
10.- Si alternamos los martillazos con un poco de heavy metal, obtendremos algo mucho más Punk.

Así que sin llorar, disfruten su agencia señores.

martes, 16 de noviembre de 2010

Gracias Totales


Siempre que se aproxima un fin de año y que empiezo a ver que haré en diciembre, es inevitable pensar en el año que se va. En algún momento le comenté irónicamente a una amiga que éste año se me había ido rapidito y de la verga, pero si en realidad volteo mi mente a Enero, lo veo lejano, sucedieron muchas cosas buenas y malas, un año en lo personal de viajes, amigos, reencuentros, grandes cuestionamientos personales, cambios bruscos, pérdidas que seguramente me llevarán hacia un mejor lugar, ¿cuál?, todavía no lo sé, pero el desaprender, desapegarse y tener que reinventarse, parece ser que hizo de mi un alguien más fuerte.

Cada año es una canica más en nuestra colección, 2010 es para mí una gran bombocha con color a la Havana, a Varadero, a mojitos, a los Cabos, a mar, a carretera, a Michoacán, a Puebla, a Barra Vieja, a San Francisco, a Cocoyoc, a mi Jeep, a mi mochila gigante en la espalda, a aeropuertos, a reencontrarme con mis grandes amigos de la vida Haydee, Lalito, Roco y Ray, a charlas con mujeres increíbles, que tengo la suerte que sean mis amigas, mi hermana y mi madre, a consejos de mi amigo Jaime, de Arturo, de Wally, de Alex, y de gente bien chida que prestó oreja a mis pesares y que estuvo ahí, conmigo. Ésta canica tiene color a depresión, a amor, a desamor, a culpa, a cerveza, a café, a cigarro, a taffil, a terapias, a traición, a lágrimas, a Polanco, a Satélite, a mi blog, a Facebook, a Oveja Negra, remodelación, a yoga, a correr como Forest Gump en el parque de Nueva York (claro el de la Nápoles), a San Charbel, a mis exroomies, a lluvia, a pasta, a carne, a vino, a sopa Knorr, a sandwiches de crema de cacahuate y mermelada de fresa.

Tiene color a besos robados, a mi tatuaje en el hombro, a música en la noche, a Fuerza Natural, a risas, a compras desenfrenadas, a leggins, a botas de lluvia, a italiano, a carpintería, a gato. Tiene también un pantone
a Pixies, a Arcade Fire, a Paul McCartney, al final de Lost, a Toy Story 3, a Remember Me, a Inception, a Alice in Wonderland, a The Brothers, a Nine, a Shutter Island, a Desde mi Cielo, a Serious Man, a Comer, rezar y amar, a Cochiloco a Mad Men, a The Office, a Flash Foward, y seguramente no dejaré pasar el color al documental de Café Tacuba y al del restreno en cine de Back to the Future.

Un año en el que una de mis personas favoritas en el mundo entero se quedó en coma y con poca esperanza que despierte, un año en el que el golfo se llenó de petróleo, se celebró el bicentenario en México, España ganó la copa del mundo y Haiti sufrió el peor terremoto de su historia. Un año en que mi cumpleaños estuvo lleno de flores, abrazos, buenos deseos y una muy buena canción de The Subways, un año en que no hubo altar de muertos pero sí el recuerdo de los mios.
Si pudiera conservar tan sólo tres fotos de éste año elijo éstas 3: 1.- Año Nuevo en la Havana escuchando a Buenavista Social Club. 2.- El viento frío en el Golden Gate. 3.- Aquella noche de chelas y tequilas en el Celtics. Aún falta Diciembre y seguramente algunas cosas más, aún tengo la esperanza que se cumpla la frase de mi abuela, año de pares, año de males, año de nones, año de bendiciones, pero no importa, hoy puedo decirles a todos, a los que están, a los que se fueron, a los que regresaron, a los aparecidos, a los que se cruzaron en mi vida éste año y muy al estilo Cerati, GRACIAS TOTALES.


lunes, 8 de noviembre de 2010

PACHUCA


No se cuántos años tenía cuando comí por primera vez ahí, tal vez era tan chiquita que no lo recuerdo, lo que si recuerdo es nosotros caminando hacia aquel lugar. Mi abuela vivía en la calle de Salvador Díaz Mirón, de ahí caminábamos hasta Pachuca, para mi eran largos recorridos por las calles de Santa María la Ribera para llegar a comer a uno de los mejores lugares que tiene la Colonia, un lugar sencillo, donde la misma famila lo ha atendido a lo largo de los años. Lo mejor de aquel lugar son los tacos dorados de barbacoa y de chorizo, las mejores tostadas, las de pata, pero lo mejor mejor del mundo es un consomé chiquito, con papa picada. Ir a Pachuca es nostálgico, pero felíz, siempre terminando de comer ahi, no puedo dejar de ir por las clásicas fresas con crema que venden en un localito que está justo enfrente.

El domingo pasado fuí a Pachuca, comí lo mismo de siempre, acompañado de una Sangía Señorial, fuí por mis fresas y caminé hacia el
Kiosco Morisco, donde patinaba cuando era una morrita, me di una vuelta y recordé el cine Rivolli, el Magestic y el Museo de Geología al que iba con mi abuela, no pude dejar de pasar enfrente de la casa que fuera de ella, la casa en la que pasé vacaciones y tardes enteras tirando burbujas de jabón por la ventana, la casa de 7 balcones más bonita de la calle.

Sin duda esas calles ahora feas, llenas de basura y esa casa que es tan distinta a lo que fué, la Alameda y el restaurancito en el que comí, me llenaron de buenos recuerdos y de un sabor a mi infancia que rara vez vuelvo a probar.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Pinky Promise

La vida está llena de promesas sin cumplir, prometemos hacer la tarea, no decir groserias, lavarnos los dientes, portarnos bien. Prometemos no ponernos borrachos, llegar temprano, no manejar ebrios, no faltar a clases, llegar temprano. Prometemos ser fieles, prometemos no olvidar a alguien, prometemos quedarnos para siempre, prometemos, prometemos, prometemos. La palabra promesa perdió credibilidad ya que una promesa debería ser casi casi un juramento, algo irrompible, algo que se debería llevar a cabo simplemente porque así lo dijiste y si lo dijiste es porque lo sentiste o tan sólo por no dejar cosas inconclusas deberían de cumplirse o mejor aún no prometerse.

Un día escuche que estaba "in" agregarle la palabra pinky a promise, y ésto más que in se convertía en algo mucho más fuerte que la palabra promise por si misma y una pinky promise jamás se podría romper. Nunca había aplicado ese término al prometer o cuando me prometían algo, seguramente me parecía bastante teto, hasta hace poco tiempo que en realidad quería con todo mi corazón que las promesas por muy simples que parecieran se hicieran realidad y fué entonces cuando empecé a emplear el término pinky promise, sólo con una persona, sólo porque en verdad me emocionaba que se cumplieran, todas, una por una, poco a poco.

Hoy tengo todas esas pinky promises en la mente, todas sin cumplir, seguramente así se quedarán, sin que la magia de la palabra pinky las pudiera haber convertido en realidad, tal vez se queden en el cajón de los recuerdos, olvidadas todas, todas menos una, una que depende de mi, una que no importa si importa, pero que quiero cumplir, una pinky promise que será la única en llamarse así, y después todas las demás serán sólo promesas, como siempre, como toda la vida.

lunes, 1 de noviembre de 2010

IU


Ella es Iu, la gatita que hace casi 4 años adopté, le encontré en una jaula afuera de una veterinaria en Prado Norte, un poco más chiquita que como aparece en la foto, en cuanto la vi me enamoré de ella y sabía que no podía pasar de largo y dejarla ahi, así que me la llevé a casa. Iu es bipolar, una gatita sensible a los cambios, le gustan las Whiskas, el atún y el pan bimbo, es muy miedosa, no sale del departamento nunca, pero cuando quiere quiere, y a mi me quiere, ella sabe lo importante que es para mi tenerla cerca, siente mis estados de ánimo, si estoy felíz ella come y es felíz, si me deprimo, ella se deprime a mi lado, uno de los días que más sentí la conección que teniamos fué un día de gran depresión, llegué llorando a casa, y ella con carita preocupada no se despego de mi lado mientras me lamía la cara, durante noches enteras compartimos la misma cama y disfrutamos tardes enteras viendo la tele juntas. Hoy Iu se fué a vivir a otra casa, es temporal, cuando lo temporal nunca sabes cuanto tiempo será, finalmente estará con alguien que la quiere igual que yo y que sé la cuidará bien, sin embargo no puedo dejar de extrañarla desde este preciso momento.

Poco a poco toda mi vida va cambiando y pequeños pedazos de mi se quedan en cada lugar, a cada paso, y hoy una gran parte de mi corazón se fué maullando en esa jaula, con ojitos asustados. Te voy a extrañar hermosa mia.

jueves, 28 de octubre de 2010

DECISIONES

Café o agua, de negro o de rojo, pelo largo o corto, güera o castaña, cerveza o vodka, me tomo una o me pongo peda, vestido o jeans, botas o tennis, gasto o ahorro, nokia o iphone, voy o me guardo, Diseño Gráfico o Arquitectura, camioneta o coche, gato o perro, agencia o coorporativo, vivo sola o con roomie, playa o pueblo, lloro o me voy de fiesta, tomo foto o video, de terror o de la risa, original o pirata, renuncio o me quedo, México o algún lejano lugar dónde nadie me conzca, voy con mi mamá o me encierro a ver pelis, lo limpio o me hago wey, cine o peli en casa, carnitas o fruta, tamal o huevitos rancheros, corro o me aplasto, yoga o gimnasio, lo busco o lo dejo, le escribo o le hablo, lo olvido o lo extraño, perdón o estúpido orgullo, con melón o con sandía, me aviento o me aguanto, le apuesto o me da frio, sigo o corto, me caso o me quedo soltera, compro o rento. Así yo y así todos vivimos decidiendo cosas, resultamos ser lo que decidimos en el pasado y en el presente por muy simple que parezcan estas pequeñas decisiones. Estamos dónde y cómo estamos porque así lo decidimos.

Los que tienen trabajos en coorporativos aburridos se quejan de su vida señoril, otros de la inestabilidad que les dio decidir ser freelanceros, los casados, están aburridos de estarlo, los solteros quieren estar casados, los que tienen hijos se sienten contentos pero anclados, los que no tienen añoran ser padres. Así que esta vida no es más que un buffet, si eliges paella nunca sabrás como estaban los camarones. Ojalá existiera un botón que se encendiera en verde para elegir lo que te va a ser felíz, y rojo para no tomarlo, pero para colmo vivimos a prueba, error, mientras la vida se va rápidamente.

Ayer mi nueva psicóloga me dijo algo que me dejó pensando. Ella, una señora de más de 60 que ve la vida tranquila y felíz, y que al sentarte enfrente sientes una vibra increible. Ella dice que la angustia que se siente por decidir no es más que miedo a vivir y si algo dura un año, tres, un mes, diez minutos, pero eso lo viviste felíz, ya valió la pena, no importa que mañana no lo vuelvas a tener. Así que seguiré decidiendo y decidiendo a ver dónde me lleva mi intuición.

miércoles, 27 de octubre de 2010

POR DIVORCIO


Si es por divorcio, entonces si te lo compro, o que espera el señorcito, que la gente pase y le sonria con lástima, o que se bajen a darle un abrazo, o al menos una palmadita en la espalda. Favor de no mamars.

martes, 26 de octubre de 2010

NOVIEMBRE

Empieza Noviembre en breve, yo estaré estrenando hogar, o más bien acompañañdome la vida en casa de mi mejor amiga, un departamento en el que más de una vez me ha dado tranquilidad y me ha recibido en tiempos difíciles, me mudo el sábado o domingo. Toda éste mes he estado empacando cosas, cosas que voy a llevar conmigo, cosas que dejaré embodegadas durante un tiempo indeterminado, tirando cosas viejas, tirando cosas que no quiero tener más, tirando todo lo que siento que pesa y que definitivamente ya no quiero cargar, despidiendome de mi hermosa gata. Ayer como hace un año y medio y como hace un año igual, cierro de nuevo cajas con cinta canela, tiro bolsas de basura y de pronto se apodera de mi un sentimiento extraño, no es nostalgia, no es tristeza, no es ansiedad, sólo son los pasos andados, los días que quedaron atrás, mi cara en el espejo que ya no es la misma, he cambiado, definitivamente la niña que dejó la casa de sus padres hace casi 5 años ya no está en ese reflejo, tanto que no la reconozco, he recorrido mucho y muy rápido, con prisa, sin parar y estoy cansada. Definitivamente no me gustan las mudanzas.

El año pasado puse un minialtar de muertos junto con los 6 nombres de las personas que merecen que no las olvide, este año no podré pero hoy al ver las flores de cempasúchil en los camellones de Masaryk, me hicieron recordar
cómo voló este año y cómo volará el siguiente. Noviembre siempre ha tenido un extraño encantamiento para mi, me gustan las hojas cayendo de los árboles, me gusta el clima de otoño, me gustan los colores del cielo, me gusta el pan de muertos, me gusta el dulce de calabaza y festejar el cumpleaños de mi hermana. Pero éste Noviembre es diferente, me sabe igual que los últimos meses de éste año, me sabe a té de boldo y de azhar, me sabe a café, a aspirinas, a donas bimbo de máquina, a pan wonder con mermelada y leche de bote, me sabe a la desgana de cenar sola y sin que el teléfono suene, acompañada con música de Calamaro para antes de dormir. Éste Noviembre no esta padre.

sábado, 9 de octubre de 2010

Grosellas 33

Hoy pasé enfrente de esa casa, que recuerdos carajo!, me pareció verme salir de esa puerta donde algún día me rompí la naríz, y si como en una peli, esa casa que ahora lucía sin luces en las ventanas, con sólo un coche blanco estacionado enfrente, de pronto en mi mente la hice de día, y vi al Ham, al Gokú, y al Corsarito estacionado dentro del garage, me vi a mi sentada en aquella mesa de sillas altas, en la cabecera, donde siempre me sentaba, pude recordar como era el comedor, el pasillo, el baño, la cobacha, las escaleras, la sala y el jardín trasero y fué entonces cuando la nostalgia se apoderó de mi y no pude parar de llorar, que rápido, parece que fué ayer, y cuánto tiempo pasé ahi y cuánto tiempo ha pasado ahora, los nuevos días se apoderaron de nosotros, de lo que fuimos. Hoy todo es completamente diferente, ni siquiera sé si él se acuerde de ése entonces. También vi a Lolita, vi los recaditos que me escribía, oí su voz dulce saludándome, siempre parecía que mi presencia la ponía contenta, y comíamos y reiamos y pasabamos las tardes enteras.

Recuerdo todas la veces que salí enojada de esa casa, en realidad nunca debí enojarme, no sabía que todo pasaría y al final y al final ya no queda nada.

martes, 5 de octubre de 2010

Extrañamente

Será una condición humana pensar que cualquier tiempo pasado fué mejor? Gente anclada de sus pasados, yo misma lo he hecho cientos de veces, recuerdo mi cuaderno de secundaria, plagado de poemas de desdicha, pensando que aquel idiota que no me pelaba a los 15 sería el amor de mi vida y nunca estaría conmigo, entonces mi camino sería obscuro y horrendo, pero no fué así la vida me ha ido sorprendiendo todos estos años, he tendio una vida llena de cosas, de gente, de trabajo, de dicha y de desdicha, sin embargo aveces me lamento aún por el pasado, sin darme cuenta que el presente lo tengo justo hoy, que el futuro es tan incierto que tal vez mañana mismo me muera, que me faltan millones de cosas que hacer, de experiencias por vivir, de lugares dónde ir, de comida por probar, de gente por conocer y porque no de lágrimas por derramar.

A nadie le gusta llenarse de años, de planes que se quedan en planes, de recuerdos tristes, de adioses, de lo que pudo ser, de si yo hubiera hecho, porque finalmente nos va apagando las ganas, nos va volviendo tristes, desconfiados, solitarios.

Extrañamente hoy no añoro nada de lo que he perdido, no me lamento de nada de lo que he hecho, de lo que he dejado. Extrañamente hoy que muero de gripa, que tuve una tarde horrenda en el dentista, de haberme perdido en las avenidas del Oriente de la Cd. de México, extrañamente hoy que no tengo nada claro, me siento bien, muy bien, creo que eso merece una buena canción.

sábado, 2 de octubre de 2010

Terminando la relación más larga de mi vida


18 años y ni un día más, voy llengando de un buen concierto y mañana diré adiós al tabaco para siempre jamás, o al menos eso pretendo.

No se si fué en secundaria o en prepa que mi amiga Martha me llevó a los baños de niñas de la escuela a fumar un cigarro alrrededor del escusado, y yo pretendiendo dominar la escena fumé y fumé un Benson arrugado y húmedo, fué entonces cuando no puede dejar de fumar, aveces por pretender tener estilo, por parecer mayor, por tener onda, por pertenecer al grupo de las chicas malas que fumaban, pero el caso es que me gustó al grado de disfrutar mi vicio durante muchos, muchos años más.

Fumé en los salones de la uni, fumé después de comer, fumé en millones de pedas, fumé entre clase y clase, fumé en mis múltipes depresiones, fumé cuando estaba borracha, cuando estaba triste, cuando estaba felíz, cuando bailaba, cuando iba a dormir, cuando despertaba, cuando tomaba café, cuando tomaba cerveza, cuando iba a un velorio, cuando quería matar el tiempo, cuando quería ligar, cuando terminaba con alguien, cuando platicaba con mis amigas, cuando iba a la playa, cuando manejaba, cuando hacía frío porque según yo me calentaba, cuando hacía calor, cuando me paraba en la carretera, cuando compartía una pena, cuando estaba eufórica y cuando estaba tranquila.

Fumé Malboro, Camel, Benson y cuando era más pobre que hoy, fumé Montana, Delicados y Boots, fumé Capri, los clásicos delgaditos y largos, fumé Raleigh y cigarros cubanos que no recuerdo su nombre, fumé cigarros robados a mi tío Rico, a mi papá y a mi hermano, fumé cualquier cantidad de bachas en las fiestas donde no había cigarros, fumé, fumé y fumé.

No sé cual es la razón por la que dejo de fumar si ahorita al pensarlo ya lo extraño, pero creo que el paso del tiempo te pone a pensar en tu salud, en el sin sentido que te da fumar un cigarro, ya que nada más te llena de humo pero ni siquiera te pone, en las asquerosas crudas de cigarro, el mal olor en el pelo, en la ropa y en los dedos. Quizá me llegó la hora, la edad, la conciencia o simplemente las súplicas de mi madre por dejar el cigarro, pero mañana a las 9 de la mañana voy a mi curso de Allen Carr, dos mil pesos espero que sean razón suficiente para dejarlo.

Hoy me fumé mi último cigarro en el concierto de Arcade Fire, hoy digo adios al delicioso sabor a humo, al increible olor a cigarro, a mi marca favorita Malboro Rojos, a mi gusto por tenerlo prendido entre mis dedos y me quedo con todos mis recuerdos, que son millones, en los que fumé y con quienes fumé.

Dejo de fumar sin odio al cigarro, con un grande extrañamiento pero con firmeza, dejo de fumar por mi, dejo de fumar para demostrarme que puedo, que me quiero y que hasta la relación más larga de mi vida puede terminar y no pasa nada. Dejo de fumar por dejar, por liberarme, por saber que puedo cambiar, y aunque quiero sé que siempre, siempre como cualquier mentada relación lo voy a extrañar.

viernes, 1 de octubre de 2010

martes, 28 de septiembre de 2010

Octubre

No puedo creer que estamos por empezar el décimo mes de éste año, otra vez se acerca Navidad, otra vez los centros comerciales plagados de madres para adornar las casas, nuevamente se cortan millones de pinos (como si sobrara oxígeno en el mundo), todo el mundo comienza a administrar los días de vacaciones que les restan por tomar, organizan en casa de quien será el guateque y claro todos gustaran todo su aguinaldo en la gran fiesta y los regalos.

Este año se me fue más rápido que el pasado, y el pasado más que el antepasado, tal cual me decían mis papás cuando era chiquita, cada año pasa más y más rápido, y esto es porque tendemos a relacionar un año con todos los que hemos vivido, así que para un niño de dos años es la mitad de su vida, para un niño de doce, la decimosegunda parte y para mi, pues ya un chingo.

De chavita me ilusionaban las Navidades, aunque siempre fueron horrendas en mi casa, siempre guardé la esperanza que mejorarían y aunque nunca sucedió yo año tras año seguía poniéndome el vestido más lindo que tenía para esa noche. La onda que llegara el niño Jesús o los reyes magos era lo mejor, estrenar juguetes, casi siempre Barbies en mi caso, era increíble. Pensar que tenía que esperar un largo año para que llegaran otra vez, se convertía en una espera larga.

Ahora me considero una Grinch de las Navidades, tan sólo ver los adornos en los supers me caga. Ayer, platicando con un amigo por teléfono me contó que ya había tomado sus días para Navidad y me dijo lo que suele hacer con su familia, yo por mi parte le conté que yo no haría nada, tal vez dormir, seguramente pensó que que chafa o amargada era, pero la realidad es que a mi ya no me emociona, talvez sea la Navidad la época más patética que ninguna otra fecha del año, talvez porque me recuerda a mi abuela que se fué cuando yo tenía 16, tal vez porque me recuerda las cenas en casa de mi tío Jacobo, con primos, árbol y regalos que ya nunca serán, tal vez me recuerda que hace un par de años compartí poner un árbol de Navidad en mi casa, tal vez me recuerda al árbol de navidad de la casa de Lolita, tal vez me recuerda al nacimiento que mi experro Yory desmadraba en un segundo, tal vez me recuerda mi cara en las esferas, tal vez me recuerda al intercambio de regalos y las compras en Liverpool de Satélite, tal vez me recuerda los nacimientos en las iglesias y las idas al zócalo para ver los adornos.

Pero este año, a menos que
suceda algo que me sorprenda en la vida, que dudo, tal vez me largue a alguna playa sola
, tal vez me tome una botella de vino mientras veo una peli, tal vez mi madre insista que vaya a cenar a la casa o a algún restaurante y es poco probable que lo haga, tal vez me deje llevar por la Mercadotecnia y me gaste todo mi aguinaldo en ropa, para consentirme, tal vez me aviente por millonésima vez Mi pobre angelito II, tal vez prefiera venir a trabajar que quedarme en casa, tal vez planeé un suicidio masivo con gente que odia la Navidad como yo, talvez me fume un porro e invoque al espíritu de la Navidad con ayuda de una guija para reirnos juntos, en realidad no lo sé y el tan sólo pensarlo me pone de malas.

Finalmente apenas será Octubre y prefiero no pensar en Diciembre, ni en Santa Claus, ni en sidra, ni en pavo, ni en nada que me amargue mi noche. Te odio Navidad.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Besos, besos, besos.

Hoy me desperté con ganas de un beso, uno de esos bonitos, largos, lentos, húmedos, de esos que te despiertan sin abrir los ojos, un beso que no diga nada, que no tenga promesas, que no carge tristeza, ni historia, ni tiempo, sólo muchas ganas.

A pesar que mi experiencia del primer beso no fué la mejor, incluso fué horrible, recuerdo haber llegado a mi casa a lavarme la cara, que asco sentí, sin embargo poco después descubrí que no sólo me gustaban sino que me hice fan. Un beso esconde muchas cosas.

Me considero una persona fan de los besos de todos, de los que guardo en mi recuerdos, de los que añoro, de los que dejé de dar e indudablemente guardo la magia de los besos de despedida, de esos que saben amargos, que se dan con lágrimas y saben a sal. De ese último beso, que sabes que es el último, o del último que aunque no sospechabas que sería el último, lo fué. El más bonito sin duda es el primero, ese que no imaginas que ocurrirá, que te llena curiosidad, que no sabes cómo será, ese en el que descubres como besa, el grosor de sus labios, su temperatura, la humedad, las ganas, y que decir de los besos que no puedes parar, de los que no te cansas y duran mucho, mucho, mucho tiempo, que te vuelves adicto y necesitas más y más y más.

Los besos con sabor a alchol tienen su mágia, los besos tiernos, los apasionados, los atascados, los mordelones. Los que das cuando prometes, los que das cuando amas, los que das sólo por ganas, los que das cuando alguien te gusta mucho, los de lenguita, los jugetones.

Los peores besos sin duda son los que das con desgana, esos deberían de borrarse, deberían no existir, los que das por compromiso, los que das sin sentir. Siempre hay que sentir algo, amor, ganas, curiosidad, gusto, lujuria, ternura, lo que sea pero algo. Un beso sin sentir no es nada

Besar bajo la lluvia, bajo el agua, bajo las sábanas, besar en la playa, en el mar. Besar antes de dormir y besar al despertar. Un beso sabor a chicle, incluso puedo decir que los besos con un ligero sabor a cigarro me gustan. Besos en el coche, besos en la noche, besos robados, besos cortos, besos tiernos, besos, besos, besos.

Y yo aquí sin un beso.


martes, 21 de septiembre de 2010

Incredible things


Fafi collection. Si Dios decidió hacerme pobre al menos debería de regalarme unas bonitas rain boats o este par de tennis, vía Santa Claus, Reyes Magos, ratón de los dientes o de la forma que el guste.

domingo, 19 de septiembre de 2010

HOY

La mañana de hoy amanecí preguntandome si en realidad me deprimo tanto como muchas veces presumo, rápidamente me contesté que no, que es un deporte para mi, al que seguramente le encuentro alguna forma de placer. Pero pensando un poquitito más a fondo me dí cuenta que no es así, hay muchas cosas que me deprimen, las grandes dosis de realidad son las que me mantienen mucho tiempo en ese estado. Claro no es una depresión que me impida levantarme de mi cama, ni dejar de dormir como bebé, simplemente es un estado constante que la mayor parte del tiempo mantengo oculta.

Me deprime pertenecer a una generación TANG, en la que todos queremos que las cosas sucedan inmediatamente, me deprime el paso acelerado de todo, me deprime vivir en un mundo desechable, todo pasa de moda rápido, todo se convierte en basura en un abrir y cerrar de ojos, todo es sustituible por algo mejor, nosotros mismos nos convertimos en mercancía, estamos constantemente en la ley de la oferta y la demanda, el amor se convirtió en un objeto sustituible, desechable y lamentablemente todos nos ofertamos constantemente, todos nos desechamos, todo pasa rápido. Me deprime escuchar a mis amigas y amigos quejandose de exactamente los mismo, me deprime que no existan las grandes historias de amor que vemos en las películas.

Me deprime no recordar con claridad las historias que contaba mi abuela, me deprimen las personas en el tráfico, los policias, el señorcito de la esquina que que con un sólo brazo intenta limpiar los coches. Me deprime ver como todos podemos criticar a las millones de mujeres que recurren al botox y a las cirujias estéticas cuando el mundo mismo se ha encargado de demostrar que el ser viejo es lo peor que te puede suceder, nadie quiere envejecer, porque simplemente no hay lugar para los viejos ni en los trabajos ni en ningún lugar. Me deprimen las noticias, los perros de la calle, hablar a mi casa y sentirme tan lejana a todo lo que ocurre ahi. Me deprime la gente deprimida, los días nublados, la expresión de las caras de las personas en el metro, sus zapatos sucios, sus mochilas rotas. Me deprime enchinarme las pestañas todos los días y saber que siempre serán lacias y gueras, me deprime lo mala que soy para el inglés, carecer de constancia para terminar las cosas que planeo, los estados de cuenta sin abrir por meses que mantengo en mi mesita

Me deprime leerme en diarios, libretas y papeles. Me deprime no tener un iphone, me deprime saber que mi gata nunca se ha subido a un árbol, ni se ha cruzado con otro gato, porque está sentenciada a vivir en un departamento en la Ciudad de México, me deprime no vivir en alguna playa, me deprime mi trabajo de más de 12 horas, me deprime las largas colas en el super, el vidrio roto de mi Jeep. Me deprime no terminar los libros de comienzo, las caras que con los años han quedado atrás, los hospitales y los asilos.

Me deprime ver personas trajeadas fumando afuera de los edificios fríos de Santa Fé. Me deprimen las putas paradas en las esquinas, me deprime que nadie escriba cartas ni postales, me deprime que nadie imprima fotos y las guarde en algún album, me deprime facebook, me deprime Radiohead, me deprimen los domingos, las llamadas cortas, el constante ruido de la gota que siempre está cayendo en mi regadera, me deprime empacar, me deprime no tener hogar, me deprime mi yo deprimida, mis tennis sucios, mi naríz chata, los vasos vacios sobre la mesa de la peda de ayer, el silencio de está mañana, los chillidos de mi gata. Hoy.

sábado, 11 de septiembre de 2010

1:40 am

Voy llegando a casa, un poco peda, un poco pacheca, un poco menos infeliz que en la mañana, cenandome unos deliciosos tacos al pastor del Huequito, muy temprano para mi gusto pero llegando segura sin que el alcholímetro que me paró me pudiera hacer algún daño, ya que fingir total sobriedad con cara de niña buena ante la "autoridad" no me es difícil. La tarde de hoy estuve con unos de mis mejores amigos Haydee y Lalo, entre ponernos al día, algunos tequilas derechos, unas cuantas cervezas y reirnos como estúpidos de casi todo lo que decimos me hiceron sentir que la vida es increíble, sólo falta acercarse a todo aquello que siempre tenemos y por momentos olvidamos. Creo que el simple hecho de estar muy cerca de casa de mis padres, de manejar por las calles de Satélite me hacen sentir segura y en casa. Esta noche dormiré tranquila y felíz, mañana será otro día.

La rola que no se de quién es ni cómo se llama

Será que la canción que escuché en la mañana me hizo replantearme tantas cosas, o más bien recordar lo que no quiero recordar. Por momentos pienso que trato de no hacer, no decir, no recordar lo que me duele, sin embargo evadir tiene su precio, cuando ves dónde estás es triste y es tán triste que por eso lo incluyo en la lista de cosas por no recordar durante el día, si no los días serían insoportables, hoy esa chispa de realidad me hizo levantarme de mi cama a las 4 y media de la tarde, tengo tanto por empacar, es cómo si todos los sueños que tuve algún día y el tratar de hacerlos me llevaron a regresar con las manos vacías, tal vez al mismo lugar, con más experiencia, pero sintiendo que algo de mi se muere con cada final y simplemente nunca regresa esa parte mía, en menos de dos meses dejo mi casa, a un año de llegar, pero ésta vez sin ganas de llegar a otro lugar, sin ganas de absolutamente nada, con el único fin de seguir hacia algún lado, esperando que la vida me sorprenda, aunque cada vez con menos ganas. ¿Cómo pueden hacer las personas para seguir y seguir sin aburrirse? Yo simplemente ya no quiero, si hoy fuera el temible 2012 haría una fiesta para celebrar que todo se vaya al diablo. Y si hoy estoy deprimida y hoy sólo por hoy, tal vez mañana me este riendo de estas líneas.

martes, 7 de septiembre de 2010

Papel Vampiro


¿Porqué el papel no se refleja en el retrovisor? ¿Acaso es papel vampiro? Tantita madre.

La tetéz en las calles de Polanco


Caminando en las calles de Polanco, encontré algo digno de postear y pedir que porfa nunca hagan esto, por mas "enamorados" que disque estén porque cabe mencionar que el amor apesta, plis nunca llenen el coche del susodicho con papelitos de colores, es lo más teto del planeta, y no puedo imaginar la cara de idiota que pueda tener la persona que ose conducir en coche asi.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Me cagaaaaaa

Porque tienen que salir cosas todo el tiempo que me encantan, y que necesisto con urgencia. Pero realmente este nuevo touch está increible, así que ahi se los dejo, probablemente sea mi próxima adquisición.


Yepa, yepa, yepa


Quiero ir al Patrick, quiero ir al Patrick, ooouuu yeah!

jueves, 26 de agosto de 2010

Pomada para las hemorroides

Hoy fuí a la farmacia, por la recomendación de una amiga a adquirir un tubito de pomada para las hemorroides, no es que yo padezca de algo así, simplemente me dijeron que es lo mejor para disminuir ojeras, pero ya estando frente al mostrador, creo que fué lo más dificil de comparar, más que pedir un condón, más que pedir una pomada vaginal, más que cualquier cosa que a muchos les puede apenar en algún momento, simplemente el hecho de que alguien piense, crea o peor aún imagine que tienes hemorroides es sumamente denigrante. Para colmo la persona que estaba atrás del mostrador era un señorcito de esos que no sabes sin son jóvenes o viejos, con pelito relamido, engelado, ligeramente encorbado y con cara de pocos amigos.

Me acerqué cuidando que no hubiera más personas pidiendo medicamentos, entonces tomé valor y dije: Señor, me da una pomada para las hemorroides, el mentado señorcito hizo caso omiso, y yo me imaginé que lo había dicho muy rápido, entonces insistí mas despacio y mucho más fuerte, mucho más fuerte, cuando me caí en cuenta que dicho intendente no me hacía nada de caso porque estaba atendiendo a un señor trajeado que se encontraba justo atrás de mi y que yo no había visto hasta el momento que me vió extrañamente, talvez con asco o lástima o que se yo, preferí no voltear más, esperé mi turno, pedí la pomada, la guarde en chinga en mi bolsa y me largue. Sólo espero que funcione y que valga la pena la maldita verguenza que pasé.

Fan de Doogie


Siempre me ha gustado ser abierta a ver cómo piensan ahora los chavitos, aunque decir esto me haga parecer vieja, me gusta ver cómo se comunican por facebook los adolescentes, que música oyen, que les gusta, cómo se visten, es como entender que este pedo cambia todo el tiempo y siempre todo es diferente, sin embargo a menudo y con cierto desaire he pensado que están chavitos, que les falta un chingo y por consiguiente no tienen mucha idea. Hoy la vida me soprende cuando un escuincle de escasos 19 años tiene unas fotos increibles, una creatividad única, y sobretodo es un wey sencillo y buen pedo, lo oigo hablar y parece que ya acabó la Universidad e incluso es más inteligente que varias personas de muchos más años, me gusta ver las ganas que tiene de aprender, de hacer y de comerse el mundo, incluso me recuerda un poco a mi, talvez antes de acabar la preparatoria, cuando soñaba con diseñar aparadores increibles en Nueva York, o exponer arte en alguna galería en París, (cosas que nunca he hecho por cierto). Me hace sentir que todas las personas de la edad que tengan nunca deberían perder esas ganas, me hace tener ganas de hacer, buscar y aprender con más tenacidad. Por lo que hoy me declaro fan de Doogie.

lunes, 23 de agosto de 2010

¿Cómo estás?

Alguien que me conoce bastante bien, me saludó hoy por el mensajero preguntándome cómo estás, y estás fueron las opciones que me dió para describir mi estado de ánimo:

Te vale pito el mundo?
Quieres golpiiar a alguien?
Te quieres dejar morir?
Te quieres hacer un cambio de look a ver si eso ayuda?
Estas pocamadre?
Quieres irte a vivir al extranjero a ver si eso ayuda?
Quieres emprender un nuevo negocio?

O irte de viaje de a mochilazo con el primer camión que salga a cualquier lado?
Te dan ganas de llorar con los comerciales del teleton?
Quieres basar tu vida en las drogas?
O quieres que las drogas basen su existencia en ti?
Quieres que el Iu se ponga las pilas y se ponga a trabajar para poderte dar la vida de riquillos?
Quieres que el tiempo regrese justo cuando decidiste estudiar lo que estudiaste y cambiarla por Administracion de Empresas?
Te dan ganas de correr un chingo hasta estar agotada, despues
llorar y despues reir como una desquiciada?
Te gustaria que pasara la ecatombe mundial ahora mismo, para tener el pretexto de voverte parte de la milicia, y ser la heroina del rescate del mundo mundial?
Te gustaria volverte gay y ver si en realidad por ahi era el camino?

Y yo ante estas opciones y ante mi bipolaridad permanetne, decidí tomarlas todas, una por una, poco a poco, jajajaja.